Clase Inmersiva con Geri
Madrugada 24 de julio de 2007
Geri:
En la taberna hace 6 horas, Geri se percató de que muchos de los Garou nunca estuvieron en la umbra o no fueron educados sobre cómo estaba compuesto ese lugar. De las conversaciones que tenían varios Cliath que estaban en estado etílico, dedujo que nunca lo habían experimentado. El alcohol no le había embriagado lo suficiente a Geri, pero con el efecto le quedaba aquella inquietud y, agradecido por la oportunidad que le daba el Alfa, pensó que debía hacer algo para retribuirle. Habiéndose transformado en lupus aquella noche, decidió ir al lago y contemplar el cielo. Pensó en los rostros de los Garou que fueron amables con él, el Fianna de rango cliath, Liv, su buena amiga quien también era cliath, y la cachorra Gwen. Usó su don “Habla Onírica” para caminar por los sueños de los demás y, por lo tanto, afectar su curso. Pensando en el rostro de los tres, entró en los diferentes sueños que tenían a esas altas horas de la madrugada e influyó en el entorno juntando todos los sueños en una sola quimera, una realidad efímera, un sueño.
El entorno de la quimera era una montaña en Sttabursdalein, Noruega, un lugar al que la mente de Geri siempre regresaba, pues allí había nacido. Un bosque de coníferas completamente congelado rodeaba el lugar. No había sensación térmica ni agotamiento, puesto que era un sueño. La montaña era vasta y en el centro había una hoguera alrededor de la cual se encontraban reunidos los garou que soñaban. Geri estaba sentado en su forma lupus, junto a ellos. En el sueño, Geri en lupus hablaba perfectamente los lenguajes humanos.
—Eternas Lunas, están dentro de una quimera, esta es una clase sobre la Umbra. —miró a todos con su semblante serio— ¿Qué es la umbra, Liv? —miró a su amiga esperando por una respuesta— ¿Por qué se creó la umbra, Finn? —miró al fianna y finalmente a la cachorra— ¿Qué criaturas habitan en la umbra, Gwen?
Liv:
Después de un largo día y una noche tediosa, Liv cayó dormida en las afueras del túmulo cerca del río. Había hecho un refugio con colchas y cobijas, sintiéndose lo suficientemente cómoda y abrigada. Se fundió en un sueño en el que se encontraba en una hermosa pradera con flores y una vieja cabaña que le recordaba buenos momentos. En la cocina de la cabaña, sonrió con ternura al poder recordar sus habilidades para cocinar y recordó la vez en la que se encontraba con Aerick, un sabio amigo que le explicaba, a través de historias, las leyendas y muchas otras cosas en las que, en aquel entonces, Liv era bastante ingenua e inocente.
De repente, su sueño comenzó a disiparse en algo borroso y frunció el ceño sin entender qué ocurría. Luego, se visualizó en unas montañas con destellos de luz como brillos en el aire. Liv inclinó su rostro al sentir la presencia de alguien que ya conocía. Sonrió y su piel se erizó al escuchar sus palabras; le preguntó en qué consistía la umbra y pensó por un momento antes de contestar.
—Se ha creído que la vida va más allá de lo que podemos ver y tocar. Los Garou creen en un lugar llamado la Umbra, donde viven sus espíritus totémicos junto a seres inexplicables. Según ellos, la Umbra es el alma de Gaia y el origen de una gran oscuridad. Algunos dicen que es un lugar asombroso que permite ver lo desconocido, pero yo tengo dudas sobre si estas teorias sobrenaturales. Creo que es importante mantener una actitud escéptica y cuestionar la realidad de la Umbra en todo momento.
Finn:
Si no hubiera sido por la molesta interrupción de Geri, el Fianna aún podría seguir en su propio sueño. Este era, como en la mayoría de las veces, más grande que la vida misma. Finn se imaginaba cargando metralletas en cada brazo, montando un Velociraptor con láseres en los ojos y atacando vampiros mientras corrían. La imagen de un vampiro con la cabeza abierta se distorsionó para aparecer enfrente de Liv, Geri y Gwen. Finn frunció los labios en disgusto, solo notando que su puro cubano del sueño anterior había desaparecido.
—Bien… la Umbra… ¿se creó por necesidad? Una escapatoria… algo preciado, y como dos lados de una misma moneda, bueno y malo.
Gwen:
Gwen se encontraba descansando sobre un montón de paja afuera de la cabaña. Era un lugar cómodo y cálido que la llevaba a quedar profundamente dormida con rapidez. En sus sueños, estaba jugando con Cola Mocha, un viejo hurón al que le encantaba corretear entre los arbustos por el bosque. Esta vez, la pequeña criatura corría ligeramente más rápido y en una dirección distinta a la que se encontraba su madriguera. Gwen lo siguió como de costumbre, pero a medida que avanzaba, Cola Mocha aumentaba su velocidad. Además, la vegetación a su alrededor cambiaba.
Pronto, los árboles y los pinos forrados del característico verde del verano se habían vuelto blancos y escasos en forraje. El sonido de las aves y otros animales había cesado, y en lugar de pisar hierba húmeda, Gwen caminaba sobre una nieve espesa y completamente blanca. Era el paisaje de un invierno en su máximo esplendor, sin embargo, no sentía frío ni calor. Cola Mocha había desaparecido sin dejar rastro.
En su lugar, Gwen observó a Liv, Finn y Geri junto a ella en la distancia. Geri comenzó a realizar preguntas y Gwen intentó responder enfatizando la palabra, dijo: —espíritus—
Geri:
Liv tenía razón, explicaba la umbra con claridad desde las creencias de los homínidos hasta la naturaleza del lugar. Geri asintió a todo con una sonrisa lupina, enseñando sus colmillos del maxilar inferior. Pero temió que sus hermanos de manada no entendieran a Liv, aunque todo estaba claro.
Intervino y levantó su pata derecha. De sus garras comenzó a brotar una sustancia líquida, transparente y flotante frente a todos. Esa sustancia adoptó una forma redonda como una cebolla.
—Todo lo que Liv Lamento de Gaia nos compartió es cierto. La umbra es el alma de Gaia. El alma de Gaia no siempre estuvo separada de su cuerpo, alma y cuerpo fueron uno durante la creación.— La masa líquida tomó la forma de un jardín lleno de colores, animales y criaturas mágicas, del cual se podía escuchar la armonía de los ruidos de todos los seres.
Geri explicó que la magia y la materia estaban unidas, pero la Tejedora, encargada de poner ley y orden y nombrar todas las cosas, separó el alma de Gaia de su cuerpo. —La umbra es como una cebolla, con capas que representan diferentes aspectos.—
La masa cambió gradualmente y se proyectó en capas translúcidas hacia su interior, como las capas de una cebolla. Las criaturas mágicas que aparecían inicialmente en el jardín fueron encerradas en las capas inferiores, dejando a los humanos, animales y plantas solos sin magia en el jardín, que asumía una imagen cada vez más deteriorada. En la capa más profunda habitaban las tres energías primordiales, representadas por un dragón, Wyrm, una mujer con ropa de araña, Tejedora, y un elemental cambiante, Kaos. En la capa intermedia había varios paisajes en mundos similares a estrellas flotantes en una noche luminosa de Tasman, cada mundo representaba una edad de Gaia. La capa junto a la superficie reflejaba el jardín, pero con niebla, así mostraba Geri a los garou presentes la enseñanza didáctica.
—El alma de Gaia quedó encerrada, separada por una barrera llamada Celosía. Finn, la umbra se creó porque el desequilibrio nació en las tres energías primordiales: Tejedora, Kaos y Wyrm, lo que produjo una separación de Gaia en cuerpo y espíritu.— Geri escuchó a la cachorra Gwen hablar de los espíritus y les miró a los tres. —¿Quién de ustedes puede decirme cuáles son las capas de la Umbra?—
Mis disculpas por la confusión anterior. Aquí tienes la corrección con los diálogos escritos con guión largo:
Liv:
Escuchaba las opiniones de los demás en silencio, imaginaba la explicación de lo que narraba Geri. Se acordaba igualmente de antes, las explicaciones que le daba cuando era cachorra. Sonreía, ya que no era fácil entenderlas, pero al final lograba comprender la mayoría de las cosas, aunque sabía que aún tenía mucho por aprender.
La pregunta que había planteado Gwen era algo compleja, pero ella intentaría responder de la mejor manera posible. Quiso ilustrar para que los demás trataran de entenderla, así que se puso de pie. Liv se levantó y tomó la palabra:
— Como dice Geri, la umbra está dividida en varias capas o mundos. Los Garou pueden viajar de un lugar a otro del Reino atravesando la Umbra sobre Puentes Lunares. También pueden viajar directamente desde el Reino hasta la Umbra. Pero los Garou no son los únicos seres terrestres que entran en ella. Una de las capas es llamada la Penumbra, justo al otro lado de la Celosía se encuentra el esplendor sin límites del mundo espiritual. La zona de la Umbra más cercana al Reino Terrestre es la Penumbra. Es el destino más habitual de los Garou que viajan aquí para combatir a los espíritus malvados que intentan corromper a las criaturas del mundo físico.
Liv respiró y comenzó a caminar por el lugar mientras continuaba explicando más de lo que le habían pedido.
— Después de cruzar la Penumbra, nos adentramos en la Umbra Próxima. En esta área nebulosa y en constante movimiento, encontramos numerosos reinos de distintos tamaños que orbitan alrededor de Gaia. Estos reinos, regidos por las leyes de sus propios mundos, determinan la realidad local en la que se encuentran. Para aquellos que exploran la Umbra, estos reinos parecen tan reales y sólidos como el mundo físico para un viajero corpóreo. Sin embargo, es válido cuestionarse si esto es meramente una ilusión creada por la mente o si realmente existe algún sustento tangible detrás de estos reinos. ¿Podría ser una forma de evadir la realidad material y encontrar consuelo en algo más allá de lo perceptible? Aunque estas interrogantes nos asalten, no podemos negar que el concepto de los Reinos Próximos resulta altamente intrigante.
—dijo y miró a Gwen, notando su confusión, así que se acercó a ella y se sentó frente a ella.
Geri:
Miró a Gwen y en su forma lupus habló para comunicarse mejor — “¿Qué parte te confunde, Gwen?” — Geri volvió a su lugar inicial y miró a los demás — “Con la información de Liv y la mía, es suficiente para que empiecen a hacer preguntas”.
Liv:
Escuchaba atentamente las observaciones de los demás mientras caminaba por el nuevo paisaje que había creado. Observaba a Gwen jugando con unos hurones y sonreía por la diversión que había logrado generar. Mientras tanto, Finn parecía sumido en sus pensamientos, encendiendo un habano y disfrutando del ambiente del sueño.
Finn:
Sabes… realmente estoy dormido en la entrada de mi cabaña…. ni siquiera dentro… pero aquí… aquí pero bien despierto. — Finn levantaba sus manos, observando cómo sus dedos comenzaban a quemarse, sintiendo el calor sin causarle dolor alguno. En sus labios apareció el mismo habano de su anterior sueño y sonrió, llevando su índice derecho a prender el puro, asegurándose de que quedara encendido de manera uniforme. — ¿Qué tal, eh? Scarface aquí…
Gwen:
Se colocó en guardia, sobresaltada al notar que el ambiente cambiaba de nuevo. Después de que el sueño dejara de ser dominado por la nieve, Gwen caminó alrededor de los presentes y se detuvo junto a Finn, quien comenzaba a respirar a través de un objeto extraño y exhalar humo por la boca. Si esto era un sueño, ella también podía hacer aparecer algo divertido. Pensó en Cola Mocha e hizo aparecer tres hurones de rabo recortado que comenzaron a corretearse en círculos uno detrás de otro.
Geri:
El entorno de la quimera y su propósito habían perdido toda seriedad. Preocupado por el conocimiento de Liv, Gwen y Finn, el lupus incrementó su cuerpo a una escala diez veces mayor, convirtiéndose en un lobo de 13 metros de altura. Abrió su hocico y engulló a sus tres hermanos de manada. De repente, todos se encontraron en una habitación roja, mientras Geri emergía de una de las paredes. — Sé que Keket no me encomendó esto, pero necesito su atención. Es importante conocer sobre la Umbra, porque no todas las batallas se pelean en el Reino de Gaia — gruñó —. Sobre la primera parte, ¿qué dudas tienen?
Liv:
Al ver que los chicos comenzaban a jugar en el sueño, Liv se colocó nuevamente seria y caminó para tranquilizar el ambiente. — Chicos, Geri tiene razón. Es importante tener los conocimientos necesarios para cualquier eventualidad que pueda ocurrir. Así que si tienen dudas, este es el momento de hacerlas. — Fue lo único que dijo antes de apartarse del grupo y sentarse a esperar hasta que Geri terminara con la clase.
Finn:
Bien… Ahora sé cómo se siente ser devorado vivo. — Dijo el Fianna con dificultad, con el puro entre los dientes. Lanzó lo que quedaba de él al estropearse por la saliva de Geri. Finn se sentó en el suelo, cerró los ojos, suspiró y tomó aire de nuevo. — ¿Es posible… usar estos puentes lunares para viajar a cualquier parte desde cualquier lado?
Gwen:
Quedó estupefacta por unos segundos. La macabra imagen de un lobo gigantesco que devoraba a otros lobos la dejó temblando. Al menos no se había orinado encima. Ya le estaban dando ganas de arrojarse de algún acantilado para poder despertar, pero la habitación roja, donde aparecieron después de ser devorados, le arrebató esa idea. Caminó un poco alrededor de los presentes, luego se sentó cerca de Finn y continuó escuchando. Tenía muchas inquietudes, pero ni siquiera ella misma sabía cómo realizar las preguntas correctas. Por lo mientras, había logrado comprender todo lo explicado.
Geri:
Miró a Finn, quien le había preguntado algo muy importante. Le había preguntado si se podía viajar a cualquier lugar desde un puente lunar. El lupus negó con la cabeza, agachó las orejas y se acostó sobre sus patas. —No, no se puede viajar a cualquier lugar. El problema es que los puentes lunares deben estar abiertos en los lugares sagrados de Gaia o en los túmulos. Y existen túmulos que no abren puentes lunares o que no los han abierto en muchos años. También existe el problema de la distancia. Los puentes lunares no pueden ir directamente a una distancia que recorre medio mundo, pero sí forman una red de puentes lunares. Ahora que estamos aquí y tengo su atención, les hablaré de cómo está conformada la Umbra. ¿Ustedes saben qué es la celosía?
Liv:
Aún sentada, respiró profundamente y miró al fondo, pensando en la pregunta de Finn. Levantó una ceja, escuchando atentamente todo. Antes de responder, quería explicar algo que creía importante sin dejar de contestar la pregunta de Geri. Se puso de pie y comenzó a narrar y colocar imágenes según narraba. —Bien, como dice Geri, no es posible pasar a la Umbra desde cualquier parte del mundo. Pero dentro de la Umbra sí se pueden conocer distintos sectores. En términos sencillos, la celosía es la capa más delgada que no permite pasar los portales o puentes lunares. Como Feria había colocado el ejemplo de la cebolla, la celosía será la parte que cubre la cebolla. — Bajó la mirada, insegura de su respuesta. Sabía que llevaba mucho tiempo y tenía muchos conocimientos, pero a veces no estaba muy segura de ello.
Finn:
Entonces… como las cebollas… ¿entre más “fina” sea la celosía, entonces más accesible es caminar de lado hacia la Umbra? ¿Por qué existe eso? ¿Cómo es más fina o más gruesa? Tengo… tengo muchas dudas… – Finn restregó sus manos contra sus rodillas, bajando su cabeza y mordiendo su labio inferior. Su única visita a la Umbra habría sido espantosa de no haber sido por su abuelo-. ¿Es posible perderse en la Umbra? ¿Cuántos Reinos hay?
Gwen:
Se levantó de donde estaba sentada, sacudió su pelaje y comenzó a caminar alrededor de las imágenes que Liv creaba con gran curiosidad. Estaba claro que se encontraba en un sueño, pero eso solo la impulsaba más a meter, ocasionalmente, la punta de la nariz en las imágenes. En cuanto terminó la explicación de Liv y Finn, realizó sus preguntas y volvió su atención a Geri, ansiosa por escuchar las respuestas.
Geri:
El lupus ladeó la cabeza al lado derecho. Martir de Gaia había dicho cosas bastante perturbadoras, ya que él solo había explicado los puentes lunares, pero nunca habló de caminar de lado, y ella generalizaba todo. Solamente se refería desde dónde y hacia dónde podía abrirse un puente lunar. No sobre la imposibilidad de cruzar la celosía. Dicho esto, el lupus se acercó a las imágenes que la theurge le mostraba e hizo algunos arreglos en ellas, mostrando que toda la creación tenía celosía, la cual separaba el cuerpo de Gaia de su espíritu, y la umbra del mundo físico. —La celosía es más delgada en los túmulos y más gruesa donde la Tejedora tiene presencia, como en las ciudades. Los Garou podemos atravesar la celosía caminando de lado. Hay que tomar en cuenta que existen partes de la celosía llamadas periferia. La periferia permite ver desde atrás en la Umbra al mundo físico, y desde el mundo físico a la Umbra. — Una vez que aclaró eso, se concentró en responder las preguntas de Finn. —Sí, mientras más delgada es la celosía, es más fácil cruzarla y entrar a la Umbra. La celosía existe desde que la Tejedora se fortaleció y dividió la creación de Gaia, cuerpo y espíritu, encerrando la magia en la Umbra. A tu tercera pregunta, la celosía es más gruesa donde hay presencia de la Tejedora, como en las ciudades o donde hay carreteras y ley humana. Ahora, para responder lo último que dices, Finn, debo explicar lo que Liv ya dijo de las capas de la cebolla, que sirve como ejemplo. — Geri agarró la imagen de la primera capa y la separó, comenzando a visualizar imágenes según iba narrando. —La Penumbra es lo primero que explora un Garou. Es una sombra arrojada por todas las cosas vivas, es decir, las entidades más vibrantes de nuestro mundo tienen un reflejo en ese otro mundo llamado Penumbra. Un bosque, un parque público o un edificio que tenga décadas siempre va a estar reflejado en ese otro mundo. En cambio, las cosas nuevas difícilmente tendrán un reflejo en la Penumbra. — luego Geri continuó explicando los distintos reinos de la Umbra, envolviendo a sus compañeros en la fascinante historia de ese mundo oculto.
Liv sonreía disimuladamente al comenzar a recordar su pasado. Era interesante volver a repasar todo lo que Geri ya le había explicado. Escuchó atentamente la explicación de Geri, sin interrumpir en ningún momento. Tenía muchas ganas de aprender, y le encantaba absorber nuevos conocimientos. Después de una pausa, Liv dijo:
— Pregunten todo lo que no entiendan, es el momento de que lo hagan, porque aún hay más información por venir. — Se acostó en el suelo y cerró los ojos tranquilamente.
Finn:
Giró su muñeca varias veces, y de su palma apareció una paleta helada de limón. Se la llevó a la boca y asintió con la cabeza, repasando en su mente lo que había escuchado, prestando especial atención al último dominio mencionado.
— ¿Recorreremos todos los reinos? Al menos en esta forma de sueño… — preguntó Finn, con curiosidad en sus ojos.
Gwen:
Estaba maravillada con todo lo que Geri les estaba mostrando. Cada nueva imagen que él extraía generaba en ella el deseo de observar con sus propios ojos esa parte de la realidad que hasta ese momento desconocía. Se preguntaba cómo se vería y olería cada uno de los dominios, e incluso si podría llegar a probar alguna de las criaturas que los habitaban. Sin embargo, rápidamente recordó su triste experiencia con las ardillas y sacudió la cabeza para apartar esas últimas preguntas de su mente, volviendo a centrarse en la explicación de Geri.
Geri:
El lupus, observó que ahora sus compañeros de manada tenían un gran interés por aprender sobre sus hermanos de manada. Pensó que la geografía de la umbra, de alguna manera, estaba entrelazada con lo espiritual. Siguió sentado en la posición en la que se encontraba, jugando con las imágenes. Retiró una segunda capa de la cebolla y la fragmentó en miles de esferas, cada una de ellas representando un reino distinto que flotaba en el aire.
— Esta es la umbra próxima — explicó Geri mientras señalaba las esferas. — Si se fijan, cada una de estas esferas es un reino en sí mismo, flotando alrededor del Reino de Gaia…
— En otras palabras, la Umbra Próxima es un brumoso remolino en el que muchos reinos, tanto grandes como pequeños, van a la deriva bajo la luz de la luna. Las trayectorias de estos reinos no están limitadas por las leyes físicas. La mayoría de los garou viajan a la Umbra Próxima en busca de sabiduría, ya que cada reino tiene una noción distinta de lo que es la realidad. No todos tienen las mismas leyes que el reino de Gaia. Existen trece reinos principales que circulan, pero hay muchos más. Estos reinos son esferas con una membrana de energía espiritual que se llama pericarpo. Cada uno de estos reinos refleja una faceta única y sorprendente de la realidad. Permíteme llevarte a un viaje por estos reinos:
Primer Reino, el Abismo: Este reino es un lugar de oscuridad y locura. Aquí, los garou se encuentran con seres olvidados, como Ángeles Caídos y Demonios. Una vez que algo cae en el Abismo, se convierte en una prisión eterna de la cual no hay escape.
Segundo Reino, Campo de Batalla: Este reino está dedicado a la guerra en todas sus manifestaciones. Aquí, las batallas históricas se recrean una y otra vez. Se dice que el Apocalipsis comenzará en el gran campo conocido como Vigard.
Tercer Reino, el CiberReino: En este reino, una imponente ciudad llena de rascacielos y tecnología se alza ante los ojos de los visitantes. En las calles, reina la miseria urbana, mientras que en lo alto de los rascacielos, aquellos que tienen poder controlan todo.
Cuarto Reino, la Cicatriz: Este reino está ligado a la revolución industrial y a la descontrolada influencia de la tejedora. Está lleno de fábricas, muchas de ellas propiedad de la siniestra corporación Pentex, y de invenciones mecánicas malvadas.
Quinto Reino, Erebo: Erebo simboliza la ira de Gaia. Es un lugar donde los garou expían sus pecados sumergiéndose en un lago de plata líquida que inflige heridas dolorosas e interminables.
Sexto Reino, la Lobera: En este reino se enseña la importancia de los lupus y las manadas de lobos para la supervivencia de Gaia. Aquellos que ingresan a este reino, si son garou, quedan atrapados en su forma lupus y deben enfrentarse a cazadores y aprender a vivir como lobos.
Séptimo Reino, el País del Verano: Este reino es un reflejo del amor incondicional de Gaia hacia sus hijos. Se dice que es un lugar noble y paradisíaco, aunque su existencia está desvaneciéndose gradualmente y se sabe muy poco sobre él.
Octavo Reino, Pangea: Pangea es un bosque exuberante, poblado por árboles inmensos y una variada vida vegetal y animal, incluyendo dinosaurios. Sin embargo, adentrarse en este reino conlleva el riesgo de perder la identidad, ya que la genética muta y se transforma.
Noveno Reino, el Portal de Arcadia: Este reino pertenece a las criaturas mágicas como las hadas y se divide en las cuatro estaciones del año. Sin embargo, ha caído en un largo invierno y los espíritus de Arcadia auguran un futuro más oscuro.
Décimo Reino, la Atrocidad: Aquellos garou que ingresan a este reino buscan aprender del pasado. Aquí se encuentran las mayores atrocidades de la humanidad y de nuestra especie, como el Impergium y las masacres humanas. Es el lugar donde nace la maldad y quienes lo exploran terminan enloqueciendo.
Onceavo Reino, del Cambio Constante: Este reino pertenece al Tío Caos y está lleno de energía y locura debido a su naturaleza cambiante y caótica. Los escenarios y los espíritus están en constante cambio, desafiando a las manadas que lo visitan.
El Doceavo Reino, Etéreo: Abarca los cielos de la Umbra Próxima y es el más amplio de todos los reinos. Aquí, los celestes y los tótems etéreos protagonizan sus aventuras. Figuras influyentes como Helios y la Luna tienen un lugar destacado en este reino expansivo.
El Treceavo Reino, Legendario: En este reino, se encuentran las vidas de nuestros ancestros, permitiéndonos experimentar cómo vivieron y entender las decisiones que tomaron.
El Decimocuarto Reino, Malfeas: Es el corazón oscuro del Wyrm. Aquí se encuentran los Príncipes del Wyrm y las más terribles manifestaciones de la perdición. Entrar en este reino puede conducir a la locura.
Estos reinos son solo una muestra de la complejidad y diversidad que caracteriza al universo de Mundo de Tinieblas. Miles de reinos más giran incansablemente, cada uno con sus propias peculiaridades y en constante evolución. —Concluye Geri.
Liv:
Escuchaba atentamente la explicación de Geri. Incorporó sentándose y se colocó de pie para que sus compañeros le prestaran atención. —Como acaba de decir Geri y explicó de qué se trata, ahora les daré mi explicación de lo que para mí es la Umbra Próxima.— Cuando el viajero atraviesa la Umbra, sigue un Puente Lunar más allá de la Penumbra y llega a la Umbra Próxima. Esta zona es una neblina que gira confusamente, salpicada de muchos reinos grandes y pequeños como mencionó mi compañero. —Estos reinos giran alrededor de Gaia. Los Garou viajan a estas otras realidades para comunicarse con sus tótems o para buscar ayuda de los poderes que los gobiernan.— Hizo una pausa, ilustrando sus palabras con la aparición de un puente de roca y un bosque al fondo. —Aparte de estos 13 Reinos Próximos principales, hay miles de dominios, sub-reinos y zonas, incluyendo la extraña Zona Onírica. Todos los dominios enumerados en la Penumbra tienen dominios más amplios en la Umbra Próxima. Las Patrias Tribales, representaciones del hogar local de cada tribu, se encuentran entre los más fuertes de estos dominios de la Umbra Próxima.— Los Reinos Próximos se formaron cuando energías monolíticas de la Tríada colisionaron con las emanaciones espirituales, débiles pero diversificadas, del Reino de Gaia. —Algunos Reinos Próximos se parecen a las energías de la Tríada que los formaron, mientras que otros se parecen a las energías terrestres que les insuflaron vida espiritual.— Todo lo que narraba lo ilustraba en el sueño. Miró y observó a sus compañeros. —¿Preguntas?—
Finn:
—Malfeas… el origen de todo mal… del Wyrm… ¿¡Y si los Aulladores fueron débiles!? Quizá… no fueron lo suficientemente fuertes para destruir al Wyrm.— El Fianna echó su cabeza a un lado, formando una bola de fuego sobre sus dedos sin quemarse, jugando con ella por las yemas. —Quizá eso mismo creyeron los Aulladores, pero… ¿no quisieran saber? Quizá nosotros seamos fuertes. Más fuertes que ellos.—
Gwen:
Una luz en la habitación llamó su atención, así que caminó hasta Finn e intentó atrapar con sus patas la bola de fuego que había creado en sus manos. Luego volvió a tomar asiento. Si existían tantos reinos, entonces debía ser fácil perderse, o al menos esa era su impresión. Agradecida por la presencia de un lupino en el sueño, aprovechó para realizar sus primeras preguntas. —Geri, ¿existen caminos para ir a cada reino? ¿Cómo podemos salir si nos hemos perdido?—
Geri:
El lupino pensó en primero responder a las preguntas de Gwen, las cuales eran más conducentes al objetivo de la clase. Arriba las imágenes que ya había creado junto a Liv, de la Umbra Próxima, creó dos nuevas. En la primera imagen se correspondían a portales, dijo: —Estos son puentes lunares, son creados por Garous con esas capacidades o por espíritus a través de sus hechizos.— En la otra imagen, creó senderos con diferentes formas, algunos parecían truenos, otros parecían cascadas, remolinos o simples caminos. —Estas son las trochas que dejan los espíritus, son caminos que podemos seguir para llegar a los reinos. Tanto para entrar como para salir de ellos necesitamos suficiente gnosis. Si se termina la gnosis, no podremos salir y mientras más tiempo estemos en la Umbra, más nos debilitaremos y será más difícil salir. Muchos Garou han quedado atrapados en la Umbra, nunca más fueron vistos. La Umbra es una zona hermosa pero a la vez muy peligrosa.— Luego, respondió a las preguntas de Finn. —Para enfrentarse a Malfeas y al Wyrm se necesita más que voluntad o fortaleza de espíritu. No es suficiente para llegar al corazón del Wyrm.— Retiró las imágenes que explicaban las preguntas de Gwen y continuó. —Finn, para enfrentarse al Malfeas y al Wyrm, existe una opción que son las Patrias Tribales. Estos reinos también están flotando. En las Patrias Tribales están todos nuestros ancestros y las familias espirituales. Por ejemplo, en la familia espiritual de la Camada de Fenris está Jabalí, Valquiria; en la familia de los Fianna está Gama, Ciervo… etc.— Continuó explicando sobre la Zona Onírica, la cual está compuesta por los sueños de todas las criaturas vivientes capaces de soñar. Se encuentra en la periferia de la Umbra Próxima y la Umbra Profunda. A la Umbra Próxima la separa de la Umbra Profunda una capa llamada Membrana, que es similar a una celosía pero mucho más difícil de cruzar. —La forma más segura de ingresar a la Umbra Profunda es a través de una anomalía espiritual del reino etéreo.— Miró a sus compañeros. —¿Tienen preguntas sobre esta parte de la clase?—
Liv:
Estaba concentrada en la explicación y escuchaba atentamente las preguntas y respuestas de Geri. Se quedó callada y observando las imágenes que se iban y venían, era demasiada información en un solo sueño. Trató de mantenerse despierta, entendiendo claramente la explicación del lupino. —No tengo alguna pregunta, creo que puedes continuar.—
Finn:
Estiró su brazo y fue dejando que el fuego hiciera su propio arcoíris de tonalidades rojas y naranjas. —No quisiera acabar como uno de ellos.— Cerró su arcoíris, canalizando el fuego en su puño, y siguió escuchando con atención las palabras de Geri, las cuales eran sabias y cargadas de información. —¿Alguna vez han visto a uno? ¿Un danzante?— Finn cerró el puño regresando por ese camino y esperó a escuchar la respuesta.
Gwen:
Negó ladeando la cabeza. Por el momento no tenía más preguntas, así que se rasgó un poco la oreja derecha, se recostó sobre el suelo y continuó escuchando mientras se lamía el hocico y la nariz. Comenzaba a tener hambre, pero prefirió no hacer aparecer algo para comer en ese momento. Además, cada vez que devoraba algo en un sueño, al despertar se sentía triste y estafada. Volvió a sentarse y dirigió su atención a las nuevas imágenes que había creado Geri.
Geri:
Llegó a la última capa de la Umbra y enredó su cola sobre sus patas traseras. Con su pata delantera derecha, levantó la última capa de la cebolla y la puso en el centro del ruedo que se había formado con sus hermanos de manada. —Esta es la Umbra Profunda, más allá de la membrana que separa de la Umbra Próxima, la realidad se fragmenta más y más. Así como la navegación también se complica.— Dibujó un árbol gigante con raíces profundas donde había reinos, al fondo indicó la Umbra Profunda. —El Árbol de los Mundos, Yggdrasil, es una de las formas en que creen que se verá esta capa. Sin embargo, cada tribu, en su anhelo de develar la realidad, cuenta historias que son contradictorias y han cambiado con el paso del tiempo. La realidad es que lo que busque el viajero es lo que encontrará en la Umbra Profunda.— Terminó de explicar todo lo que había aprendido sobre la Umbra y respondió a Finn cuando el cuarto rojo se rompió y un danzante los observó de cerca. Era un metis, tenía quemaduras en la piel y el pelaje no era sano. Tenía ojos que transmitían locura. Después de que todos lo observaron, Geri salió, confiado en que esa aparición les despertaría. Cuando Geri despertó, fue a beber agua y a comer un poco de pescado junto a la laguna, disfrutando del amanecer.
Liv:
Escuchó atentamente la última explicación mientras miraba las imágenes. Esta era la parte que menos le gustaba de la umbra, así que no esperó mucho a que terminara. Pensó si a su compañero le quedaba alguna duda, pero tampoco tenía ninguna incógnita. Si surgía alguna, se la haría personalmente cuando despertara. Salió del sueño y abrió los ojos con dificultad, aún un poco aturdida. El día sería agotador, pero debía ponerse en marcha, pues el sol ya estaba alto en el cielo. No recordaba haber dormido afuera, cerca de la cabaña y la laguna. Observó a su alrededor y el lugar estaba desierto. Se puso de pie y decidió darse un buen baño allí mismo. Se quitó la ropa y se sumergió en el agua fría.
Finn:
La mandíbula del Fianna se abrió un par de centímetros. A pesar de haber oído hablar de los Danzantes, nunca imaginó lo horrible que sería contemplar a uno. Era la personificación misma de todo lo que estaba mal en la sociedad Garou. Consciente de que todo esto era un sueño, y seguramente uno mucho peor en realidad, Finn apretó los labios y se acercó al sucio Metis. Levantó su mentón y lo miró fijamente a los ojos. —No te tengo miedo. Ojalá esos cuernos sirvan para embestir… llevas la marca de la presa, boy-o… marca de la presa, marca de la presa, marca de la presa… —Sus palabras se fueron desvaneciendo a medida que su cuerpo se desvanecía y despertaba de su largo sueño, tal como había dicho. Finn se encontraba recostado en los escalones que conducían a su cabaña, con la cabeza apoyada en la cantimplora con forro de cuero. La culpa la tenían los cachorros Fianna que se les ocurrió hacer una fiesta improvisada, una falsa festividad conocida como “Día del No-Padre”. Se acomodó y se sentó en los escalones, sonriendo, pues sabía lo que iba a hacer la próxima vez que interrumpieran su sueño. —1, 2… Freddy viene por ti…
Gwen:
Dio un gran sobresalto y soltó un chillido. El supuesto danzante resultó ser una criatura terrible y espantosa. Esperaba, ojalá, nunca encontrarse con algo así. El susto la hizo despertar de golpe, con un fuerte estremecimiento. Se encontró en una posición completamente distinta a como había caído dormida. Aparentemente, había estado moviendo sus extremidades y dando vueltas sobre la paja durante toda la noche debido al sueño tan vívido que había tenido. Se levantó y sacudió su pelaje. Estaba frío y sucio. Definitivamente, no volvería a dormir afuera de las cabañas. Estiró sus patas delanteras y salió corriendo hacia el bosque en busca de su desayuno.